jueves, 26 de julio de 2012

El IVA de los contratos 'se come' el ahorro municipal en la paga extra y los sueldos


El Ayuntamiento pagará 600.000 euros más este año por el servicio de recogida de basura o la luz, y 1,8 millones más a partir de 2013

Lo comido por lo servido. El Ayuntamiento no tendrá más remedio que aplicarse esta expresión popular, a nivel presupuestario, ya que el ahorro que obtendrá con la eliminación de la paga extra de Navidad a los trabajadores y los concejales, así como la reducción de sueldos aprobada para estos últimos y los cargos directivos, se verá anulado por el aumento de los gastos en los contratos de servicios tras el incremento del IVA.
Según datos de la Concejalía de Hacienda, mientras que la institución municipal evitará el desembolso este año de 2,27 millones de euros (2,1 millones del plus de diciembre y 170.000 euros de salarios de los cargos públicos), se verá obligada a abonar 600.000 euros más por el IVA en las facturas asociadas a contratos como los de recogida de la basura, suministro de agua, alcantarillado, depuración, electricidad o telefonía. Esta última cantidad subirá hasta los 1,8 millones a partir del año 2013, lo que exigirá un nuevo esfuerzo a un Ayuntamiento que funciona ya con un plan de ajuste para los próximos diez años.
Ingresos para el Estado
Según fuentes municipales, la variación al alza de los gastos corrientes ligados a los contratos de servicios tendrá repercusión a partir del mes de septiembre, aunque los consumos se hayan realizado en julio o agosto.
La explicación es que la ley establece que los suministros de telecomunicaciones o luz prestados en los últimos meses pero cobrados con posterioridad a la subida del IVA se les aplicará el nuevo tipo del 21% (desde julio de 2010 era del 18%). En el caso del agua ocurrirá lo mismo, si bien a este servicio le corresponde tributar al tipo reducido, que pasa del 8% al 10%.
Las mismas fuentes explicaron que el dinero de más que perciban las empresas concesionarias irá a parar a la administración general del Estado, que se vale así de un mecanismo rápido para reducir su déficit.
A este 'palo' fiscal hay que sumar el incremento de la tarifa eléctrica en un 7% afrontado también por el Ayuntamiento tras la medida aprobada en abril por el Gobierno central para paliar el déficit de las empresas energéticas.

Farolas menos tiempo
Durante el último año, el Gobierno municipal ha tratado de reducir al máximo el gasto energético de la institución con decisiones como reducir la intensidad del alumbrado público, así como el tiempo de funcionamiento. Se apura al máximo en el aprovechamiento de la luz natural, de manera que las farolas de calles y plazas son encendidas más tarde y apagadas antes. Además, ha adjudicado un contrato de gestión del alumbrado que hace hincapié en la mejora del ahorro y los sistemas de eficiencia.
Aunque a la Concejalía de Infraestructuras y Servicios le va quedando poco margen para abaratar la factura que paga por la iluminación de la vía pública y la refrigeración de los edificios municipales, continuará los esfuerzos para conseguir todos los avances posibles con nuevos medios técnicos y un control más riguroso.
Además del coste de la luz, hay preocupación por detectar y solucionar con más rapidez y fiabilidad las averías. A través de un sistema de información geográfica, se podrá conocer en tiempo real los fallos en el alumbrado, para evitar situaciones como la acumulación de quejas de las últimas semanas por apagones en zonas como Los Urrutias, Los Belones o Perín.
Dentro de los planes del equipo de gobierno para aminorar los costes de los contratos públicos, recientemente también se convocó un concurso para el suministro de combustible para «vehículos, maquinaria autónoma, grupos electrógenos fijos y portátiles o instalaciones de calefacción.
Asimismo, el Ayuntamiento de Cartagena ha puesto en marcha la Comisión de Seguimiento y Control de Aquagest, la empresa concesionaria del suministro de aguas. Y trabaja también en distintos planes de mejora de la vigilancia de los contratos de las empresas de recogida de la basura, Lhicarsa (formada por FCC y Ayuntamiento), y de autobuses, Alsa.
Férreo control del gasto
Junto a la vigilancia de estos gastos, los concejales de Hacienda y Servicios, Fátima Suanzes y Francisco Espejo respectivamente, tienen además el encargo expreso de la alcaldesa, Pilar Barreiro, de hacer un 'marcaje' a todos los contratos de bienes y servicios del Ayuntamiento. Se trata, según fuentes municipales, de no gastar ni un euro más de lo imprescindible.

Fuente: laverdad

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